15 pelis que vi

Fueron muchas en un período corto y creo que no he terminado de asimilarlas del todo. Un párrafo para cada una:

Paradise Now
Dos palestinos son escogidos, bendecidos, para ser los próximos encargados de hacer un atentado suicida en Israel. Viven vidas normales, van al mercado, se pelean, se enamoran. Casi tan bueno como la película, el silencio en la sala cuando se acaba. Largo e incómodo.
(Si fuera una película colombiana hecha por colombianos, la mitad de la población, incluida toda la clase política, hubiera protestado; ellos, más que nadie, deberían verla para darse cuenta que hacer arte de los problemas nacionales es una forma eficiente de combatirlos.)

Munich
A pesar de los personajes que son casi una caricatura de sí mismos, Munich se mantiene agarrada por la historia que es fuerte y por la cámara de Spielberg. Pero al final cae en la necesidad gringa de explicar la lección moral que tienen todas las acciones en el fondo, y la magia se pierde.

Brokeback Mountain
Una película 'importante' dijeron algunos. Yo la ví en Chicago y la mayoría de los presentes eran parejas de hombres. No sé si homosexuales o no, pero casi que me atrevo a decir que sí. Y se entiende. Si fuera una historia de amor entre un hombre y una mujer no pasaría de ser una peli mala con una buena fotografía. Y creo que lo 'importante' que busca ser la convierte en homofóbica, al querer volver especial una cosa que no lo es: que un hombre se enamore de otro. Sí, era un lugar y un momento complicado para mostrar ese amor. Y yo, como casi siempre, hablo desde mi ignorancia. Pero en verdad, la peli es bastante floja. De rescatar, como siempre (menos con Juanes), la música de Gustavo Santaolalla.

Syriana
De rescatar, el intento por hacer una peli de acción que atrape audiencia para explicarles a los gringos de una manera entendible qué se afecta en el mundo con las decisiones que se toman en Washingtnon en materia de petróleo. Una de las pocas del mainstream que no tiene miedo de no explicarse del todo. Deja cabos sueltos y espacio para pensar.

Good Night and Good Luck
En medio del delirio que hay en este país, que constantemente se pregunta si la prensa está en buenas manos, y siempre se responde que no, la película de Clooney es casi una contradicción. Edward Murrow fue fundamental para la caída de McCarthy, el republicano más famoso por sus ataques a los derechos civiles hasta que aparecieron Giuliani y el gobierno Bush. Su historia -la de Murrow- ha inspirado a muchos defensores de los derechos fundamentales y de la libertad de prensa. Pero Clooney está demasiado metido en su cuento y deja de lado el contexto. Murrow es importante, y es importante contra esta historia, pero hay que contra por qué es importante. Además, varios personajes que merecían mejor suerte se vuelven parte del set y sus historias se pierden.

Broken Flowers
Todavía la estoy tratando de completar. Y me encanta seguir tratando.

Capote
Esta me gustó. Sencilla, bonita… aunque sin Hoffman hubiera sido una buena peli en Sundance y sin chances de llegar a ningún lado. (Me toca decir que le pregunté a Philip Seymour Hoffman en persona cómo preparó el personaje y que le dije que me parece que es uno de los mejores. Y también me toca mencionar que vi en New York magazine o alguna otra que no hay nada menos newyorquino que tener un ataque por ver a Hoffman, porque él es parte del paisaje.)

Caché
Cuando los franceses quieren hacer películas buenas, hacen las mejores. El comienzo de esta es tal vez el más inteligente que he visto en años, y no lo cuento porque me lo tiro. Y el director (el mismo de La Pianista) crea tensiones deliciosas durante las dos horas que dura. Contestando a alguen en otro blog, tal vez esta sea una de esas que creo entender pero en verdad no entiendo.

Transamerica
A diferencia de Capote, que se agarra de Philip Seymour Hoffman pero se mantiene sola, Transamérica no huiera sido nada sin Felicity Huffman. Está llena de clichés y la historia no es completamente creíble. Pero no entiendo todavía (bueno, de pronto sí, porque los premios no significan nada a veces) cómo le dieron el Oscar a Reese Witherspoon y no a Huffman.

Melinda and Melinda
Si uno hace una película que es mitad drama mitad comedia, está en problemas si no es muy claro cuál es cuál. Esa crítica no es mía, pero dice lo que yo pienso en mejores palabras.

Walk the Line
Johnny Cash fue lo máximo, su esposa June Carter fue muy importante para sacarlo de las drogas y ayudó a crear el mito. Pero la verdad, Joaquin Phoenix y Reese Witherspoon pudieron haber hecho un remake de Grease y hubiera dado lo mismo. Está mal actuada, la historia es más importante que la música (error fatal) y no sé si mencioné que la protagonista es Reese Witherspoon.

Breakfast on Pluto
Si se cumple la premisa que las películas nunca son tan buenas como las novelas que las inspiran, esta debe ser una absolutamente increíble. Neil Jordan hace una adaptación preciosa sobre la vida de Kitten, un travesti que crece en medio de la guerra en Irlanda. No es el Neil Jordan de The Crying Game: es mejor. (Hay pájaros que hablan y les pone subtítulos.)

The Squid and the Whale
Yo no tengo por qué saber nada acerca de cómo se vivía en Brooklyn hace 25 años. Bueno, ahora que vi esta, sí. Una pareja de intelectuales demasiado intelectuales para ser felices parece hacer su máximo esfuerzo para que sus hijos tengan una vida tan miserable como la que ellos mismos tienen. Es autobiográfica, así que seguro tiene exageraciones, pero en general es una gran peli y está muy bien actuada.

Temporada de Patos
Alguien dijo que esto es lo que Jim Jarmusch hubiera hecho si le hubieran dado Home Alone. No es difícil pensar en una peli en la que una niña bonita, dos amigos empezando la adolescencia y un repartidor de pizza pasan un buen rato. Mentira, sí es difícil. De lo más bonito, además de las venias a los Beatles y la fotografía del comienzo (toda la peli es en blanco y negro), es el humor. Sencillo y muy, muy efectivo.

Match Point
Hay algo de Woody Allen que se siente como el Woody Allen viejo y eso me encantó. Pero el personaje principal es muy importante y el protagonista (cómo se llama?) es malísimo. No se le cree nada de lo que dice. Además, Scarlett Johansson se adueña de las escenas que comparten de una manera que es casi embarazosa. Es casi un desperdicio de actriz ponerla con ese tipo. Pero es Woody Allen y de él siempre se aprende algo.

a night at the opera

Después de un día largo de clase y de ir a caminar Queens para tratar de conseguir unas fotos que nunca llegaron, me encontré con Emilie en la fuente de Lincoln Center y fuimos a ópera, a ver Las bodas de Fígaro.
Es una de las pocas óperas que he visto más de una vez, así que más o menos tenía idea de en qué me estaba metiendo. Al menos eso pensaba. Pero se me olvidó un detalle: estaba yendo a ópera en Nueva York.
Evidentemente no era la noche de estreno: no había abrigos de animal muerto ni recuerdo haber visto un solo corbatín. Pero sí muchas corbatas, demasiadas, y niñas vestidas con mucho cuidado, por decir lo menos. Mucho maquillaje. Del de buen gusto.
Al lado nuestro había una japonesa, o al menos debía ser una japonesa, con un vestido azul con bordados en hilo de oro y un estampado rojo que parecía el sol.
Durante cuatro horas no oí una sola palabra en español, lo que en esta ciudad es bastante raro. Y en uno de los intermedios salí a tomarme una botella de 200 ml de agua y un Toblerone. 10 dólares, con tip.
La primavera, la bendita primavera...

menos uno

Parece que esta vez no se le puede echar la culpa a George W. Bush... qué lástima. Y no se le puede echar la culpa porque ha pasado antes: después de llegar a los 20 centígrados el fin de semana pasado, y que primíparos como yo pensáramos que la primavera había llegado, hoy nevó. Poco, es verdad, pero nevó. Y yo, y mi camisa, nos morimos de frío.

¿Orfeo?

Cuando me estaba quedando dormido anoche, me di cuenta de que estaba hablando solo. Hablaba con una mujer que me conoce y me hace sentir bien, aunque no sé quién es.
Hoy me desperté temprano y estuve fuera todo el día, y después de almorzar a las 5:30 fui a casa para una corta siesta. Cuando me estaba quedando dormido, sentí que algo se apoyó sobre mi hombro.
Había sentido lo mismo alguna vez en mi apartamento de la 86, en Bogotá, y lo atribuí a un amigo invisible que aún visita a Xime y a Juliana. Pero ahora creo que no era él.
En una película aprendí que para saber si se está soñando basta mover un interruptor, porque en los sueños la luz no cambia. Tenía cerca la lámpara con dimmer y lo giré hacia los dos lados. La luz era siempre la misma. Yo juro que estaba despierto.

depresivo... divertido... same difference

la historia es de todos los días: jim, un escritor, va a nueva york 'a lograrla'. como el 99 por ciento, no la logra. y, a los 27 y sin un centavo en el bolsillo, se devuelve a la mitad de la nada a vivir con su familia en un pueblo de mierda.
tim, su hermano mayor, separado y con dos hijas, trabaja en la fábrica de su mamá y vive también con sus papás. I am a fuckup, le dice jim a tim, but you are a walking tragedy.
y en algún momento, le dice a su mamá, cuando ella le pregunta que qué hicieron para criar unos hijos tan tristes, que some people just shouldn't have babies.
Cuando me acostumbré a la idea que la película nunca empieza, me di cuenta de que Lonesome Jim, de Steve Buscemi, es una película depresiva absolutamente divertida.