11.20.2005

Autumn in New York

Es domingo, hace 'calor' de 13 grados centígrados y estoy tomándome un capuchino que parece de verdad con Alessandro el grande en un lugar a menos de un minuto de caminata desde nuestro edificio. Amsterdam y 120.

La mesera habla en un español cuya procedencia todavía no logro captar y es bastante rápida con los croissants y los panes de chocolate. El chocolate está derretido y la masa del pan no está demasiado caliente.

Tengo que escribir 1500 palabras para mañana y por un milagro que no sé a quién atribuir, tengo más de 1500 palabras listas para escribir y ganas de hacerlo aunque el sol está brillando sobre Central Park.

Me encierro en el apartamento -todavía no me acostumbro al olor a humedad- organizo la ropa y me siento a escribir. Primero esto, dejo para después las otras 1500 palabras. La luz del otoño entra por esta ventana -que apunta hacia el sur- como si apuntara hacia el sol.

Suenan David Byrne y sus muchachos. This used to be real estate, now it's only fields and trees...

Timbra el teléfono y esta vez sí es ella. El mundo, finalmente, es perfecto.

2 comments:

OjO al Texto said...

Un saludo desde Bergen.

elpatojo said...

Lacónico, como es ya costumbre (como dicen por ahí: lo bueno si breve...). Es muy buena la forma de expresarte, síntomas austerianos, evidencia del efecto neuyorkino quizá.

Me uno al coro que pide la actualización con mayor frecuencia.
Salud!